En la tarde del viernes en una asamblea celebrada en Villaguay, la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (FARER) renovó su conducción designando al Médico Veterinario José Colombatto como nuevo presidente. El dirigente de Gualeguaychú, hasta hoy presidente de la Sociedad Rural, será acompañado por Nicasio Tito como Vicepresidente, Alejandro Muller en la Tesorería y Luciano Olivera en la Secretaría.
En ese marco quien presidia la federación, Raúl Boc hó, agradeció el apoyo recibido de los dirigentes y rurales, el trabajo en equipo alcanzado, con una representación en la provincia que ha permitido la inserción en muchos ámbitos de FARER. Expresó que la falta de crecimiento de los ateneos le preocupa y queda como una acción pendiente de concretar, atento al valor que representan los jóvenes en el recambio generacional.
En otro orden lamentó no haber podido constituir un canal de dialogo con el gobierno provincial, sin que se obtenga la posibilidad de que las entidades del campo sean recibidos por el gobernador. Tras asumir el nuevo titular de la entidad ruralista provincial, se dirigió a los delegados representantes de las entidades: “Hoy estamos acá porque hemos venido compartiendo en este tiempo algunos diagnósticos y desafíos con otros colegas y ha surgido que encabece esta propuesta, hecho que me llena de orgullo a mí y a la Rural que represento.
Gualeguaychú está aquí hoy básicamente por un trabajo de años y porque han visto en nosotros la lucha que hemos venido dando en distintos aspectos. Nos ha tocado pararnos frente al poder de la Municipalidad y resistir. Y tal vez no salimos victoriosos pero dejamos en claro que defendemos y defenderemos a los productores ante el atropello y la injusticia.
Fuimos claramente la punta de lanza de esta lucha. Hemos enfrentado a un intendente que siguiendo recetas del pasado ha tomado al campo como enemigo. Ni siquiera escucha ni dialoga. Con esa forma atrasada y perniciosa sólo ha perjudicado al productor y a la producción. Plantearon un cambio en el sistema productivo traído de los pelos y sin un período de gradualismo.
Y justamente en esta lucha desigual nuestros colegas han visto una dirigencia que ha sabido resistir y que está preparada para el escenario actual. En este mismo sentido, vale decirlo, apostamos a que el gobernador Bordet continúe entendiendo al diálogo como herramienta de madurez y consenso.
Nuestro primer desafío será la defensa de los agremiados, ya que cada productor, e incluso cada Sociedad Rural, se encuentran en franca desventaja a la hora de reclamar en soledad ante el Estado u otros organismos. Queremos encabezar una gestión dialoguista con todos los sectores y aquí incluimos al Estado Provincial.
Entendemos que se pueden consensuar acciones, medidas y políticas. Creemos que los consensos son importantes. Igualmente ello no significa que seremos una gestión genuflexa ni timorata. Estaremos atentos a cada medida, a cada acción y en caso entender que hay injusticias contra el sector, acudiremos a la movilidad de las bases sin duda alguna.
Buscaremos desde el primer día trabajar en los pilares productivos de la provincia, no sólo en las actividades más representativas, ya que se impone fomentar y defender las economías regionales y las producciones alternativas. Necesitamos que los Gobiernos Provincial y Nacional reconozcan la importancia del sector y no sólo nos vean como una caja extractiva.
Somos una región del país donde lo eminentemente agroganadero y agroindustrial es pilar de la economía, la inversión, el desarrollo y el empleo de Entre Ríos. Básicamente necesitamos estar incluidos en un proyecto productivo y no ser sólo un fusible ante los ahogos financieros de la provincia y de la Nación.
Entendemos y sostenemos que la producción y lo ambiental no se contraponen. Apoyamos las buenas prácticas agrícolas y no defendemos a los productores que hacen mal las cosas, porque somos fervientes guardianes del medio ambiente. No nos oponemos a la agroecología. Es más, creemos que todos los sistemas productivos deben ser alentados. No obstante, el modelo productivo a gran escala vigente en Argentina y en el Mundo, está basado en el apoyo técnico de fitosanitarios autorizados.
Hoy es inviable prescindir de ellos, por lo cual apoyamos los controles para que no haya ningún tipo de riesgo sanitario o ambiental. Por otro lado, es insostenible que la Justicia sea quien defina el modelo productivo agropecuario. Por todo esto es imprescindible contar con una ley que salga del consenso de los principales actores. Contamos con el soporte científico suficiente, como así también con la legislación comparada con otras provincias y países del mundo para avanzar en una normativa moderna y eficiente.
El desafío es estar al lado de cada productor, de cada cámara o cooperativa para acompañarlos y transitar juntos un camino que lleve al fortalecimiento de cada actividad. Hoy nos ponemos en marcha, o mejor dicho, continuamos la marcha que nos deja Raúl y su equipo. Transitemos juntos este camino. El productor entrerriano nos necesita más que nunca.” Fuente: FARER.