"Troncosso durante estos últimos 7 años fue nada más y nada menos que el chico de los mandados y vocero del gobernador Sergio Urribarri"
“El intendente de Maciá, Ricardo Troncosso, una vez más deja aflorar su odio más recalcitrante en contra de un dirigente que fue elegido en tres ocasiones para conducir los destinos de esta provincia. Pero todos los entrerrianos en general y los radicales en particular saben el rol que ocupó Troncosso durante estos últimos 7 años; fue nada más y nada menos que el chico de los mandados y vocero del gobernador Sergio Urribarri”, expresó el Presidente del Frente Entrerriano Federal, Claudio Ava Aispuru al responder las declaraciones del maciaense.
“Nefasta y vergonzante es la actitud de este dirigente, añadió, que prefiere vivir en el odio y el rencor; se nota que el paso del tiempo no le ha enseñado nada y su opción es la de vivir en el pasado”.
En ese marco, Ava Aispuru aseguró “lamentablemente para el intendente de Maciá, los radicales que conducen hoy al centenario partido, afortunadamente no tienen la misma visión retrograda y troglodita de Troncoso y están decididos a construir un radicalismo de cara a la gente”.
Luego el joven dirigente aseveró “Vemos que Troncosso prefiere apelar a las antinomias del pasado para conservar los favores personales que le brinda el poder luego de haber forjado una solida amistad con el Fiscal de Estado julio Rodríguez Signes y el propio Urribarri mientras se sustanciaba el famoso Juicio Político a Sergio Montiel al que hace referencia”.
“La memoria de Troncosso, continuó diciendo, parece funcionar de a ratos, pero en todo este tiempo no lo hemos escuchado decir una sola palabra acerca del alarmante endeudamiento que tiene la provincia, del impuestazo que no se coparticipa a los municipios, ni de las designaciones inconstitucionales en los organismos de control del estado. En definitiva mantiene un silencio cómplice con sus nuevos amigos del kirchnerismo provincial”.
Finalmente Ava Aispuru reflexionó “Mientras una enorme mayoría ciudadana pide respeto y diálogo entre las distintas fuerzas políticas, Troncoso sigue anclado en el maniqueísmo que ha pretendido instalar de forma sistemática junto al kirchnerismo, dividiendo peligrosamente a los argentinos”.