FARER: "EL ESTADO NO PUEDE JUGAR A LAS ESCONDIDAS"
La Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (FARER) desea manifestar su honda intranquilidad en relación a los bloqueos sufridos por las empresas Lácteos Mayol y Frigorífico Arrebeef -ambas de la provincia de Buenos Aires-, ya que han puesto en jaque a la producción y el trabajo, ante la mirada impávida del Estado.
Acciones de índole extorsiva, actos vandálicos, en definitiva, hechos de gravedad inusitada que tienen como epicentro disputas gremiales, se siguen manteniendo en el tiempo por un Estado perezoso en todos sus niveles que no actúa y mira como espectador un conflicto que no puede ser dilatado en el tiempo por las enormes consecuencias que esa parálisis acarrea.
Una vez más se han vulnerado derechos y se ha omitido la voluntad de trabajar de cientos de empleados en nombre de meras disputas sindicales que parecen contar con la complacencia de parte de la dirigencia política y algunos sectores de la Justicia que han decidido mirar para otro lado.
Resulta increíble que en semejante momento del país y de la situación social, debamos soportar estos episodios. Ya no hay más tiempo para dilaciones. Urge que el Estado actúe con premura y responsabilidad.
PUBLICACIÓN RELACIONADA. Reproducción del artículo del diario La Nación -ver video-.
“Sáquenme esta lacra”: el pedido entre lágrimas del dueño de una pyme láctea que estuvo bloqueada
En medio de una medida de fuerza de un sindicato lechero que sufrió Lácteos Mayol, en la localidad bonaerense de Gobernador Udaondo, se conoció un conmovedor video de Hugo Mayol, uno de sus socios.
En medio del bloqueo que sindicalistas zonales de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (Atilra) mantuvieron durante cuatro días sobre la fábrica Lácteos Mayol, de la localidad bonaerense de Gobernador Udaondo, en el partido de Cañuelas, uno de los socios de la firma, Hugo Mayol, grabó un conmovedor video donde pide, llorando: “Sáquenme esta lacra de encima”.
Entre el lunes y el jueves pasado, la firma estuvo bloqueada por sindicalistas que reclamaban que la mitad de 14 empleados de la pyme láctea pasaran a Atilra. Argumentaban que se encontraban en otros gremios para pagar menos cargas sociales y otros debían ser recategorizados.
La embestida sindical, que según la familia Mayol incluyó roturas en la fábrica, como en un generador, llevó a la pyme tener que tirar más de 5000 litros que no se pudieron procesar por el bloqueo.
“Hola, soy polaco Mayol, todos me conocen así, soy socio de la empresa lácteos Mayol”, se presenta Hugo Mayol en un video de poco más de dos minutos.
En otro tramo hace referencia a una movilización que se hizo cerca de Gobernador Udaondo con la presencia de vecinos del lugar y el apoyo de sociedades rurales de la región. Explicó que se hizo para hacer ver los hechos, “cómo podemos salir de esta situación terrible”.
“No me puedo expresar bien, tengo un dolor en el alma muy profundo, no tengo miedo porque ya les dije que con 73 años hagan de mi cuerpo lo que quieran, no era nada difícil para ellos, 30 patoteros, que me agarren en medio de la calle solo y cagarme a palo”, señaló. “Ya me cagaron a palo demasiado con todo lo que está pasando, tengo el cuerpo dolido, pero no vencido”, agregó.
Luego, emocionado y entre lágrimas reclamó: “Realmente espero que alguien en este bendito país saque esta lacra de mi fábrica, la fábrica de mi abuelo, sáquenme esta lacra, ayúdenme”.
La fábrica, que fundó su abuelo, tiene 86 años de vida. A última hora del jueves se dictó una conciliación obligatoria por parte del Ministerio de Trabajo provincial. Los activistas estuvieron varias horas más en el lugar hasta que se retiraron.
Según informó el portal InfoCañuelas, el juez Martín Miguel Rizzo, del Juzgado de Garantías 8 de Cañuelas, concedió una restricción perimetral pedida por Dardo Mayol, hermano de Hugo y dueño también de la fábrica.
Por 120 días, el secretario General de la seccional Cañuelas de Atilra, Guillermo Arregui, no podrá acercarse a Mayol y su familia.
LA NACION